Con la brillante conquista de la Eurocup por parte del Power Electronics Valencia aún en nuestras retinas, el baloncesto español se dispone a luchar por otro título continental, el de la Euroliga, que estará en juego mañana domingo en París con el Regal FC Barcelona como indiscutible aspirante. Su gran victoria sobre el CSKA en la semifinal le ha hecho aún más acreedor al premio final.
No es noticia que nuestros clubes y nuestros jugadores –con sus equipos y también con la Selección- acaparen la atención en los grandes campeonatos. En la Final Four de la capital francesa nuestros campeones de Europa y del Mundo estarán especialmente representados por Juan Carlos Navarro y Ricky Rubio, exponentes de la generación de los juniors de oro uno, y del más joven talento otro; y junto a ellos un Fran Vázquez que está rayando a un nivel excepcional a lo largo de toda la campaña.
Estoy convencido de que, al igual que lo han sido en la excelente trayectoria del equipo azulgrana hasta el momento, los tres serán protagonistas de este último partido de la Euroliga 2009-2010, como lo fueron en la semifinal y como lo fueron hace unos días para el equipo valenciano, también de forma especial, Víctor Claver y Rafa Martínez.
El baloncesto español está en lo más alto del concierto internacional también de octubre a junio, por el excelente trabajo desarrollado por nuestros clubes y por la huella ‘made in Spain’ que dejan nuestros jugadores.
Rubricar la temporada europea con un segundo título absoluto de clubes sería un broche extraordinario. El Regal FC Barcelona ha demostrado sobradamente en los últimos meses merecerlo como el que más. Sólo le falta dar el último paso.
Ojalá mañana lo podamos celebrar.